El cierre de año es un excelente momento para tomar el control de tus finanzas y crear un plan realista que te permita reducir tus deudas antes de diciembre. Con un poco de organización, disciplina y aprovechando los ingresos extras como el doble sueldo o bonos, puedes dar pasos firmes hacia la libertad financiera.
Con esta guía práctica puedes revisar tu situación, definir un plan y adquirir hábitos sostenibles que te ayuden a mantenerte libre de deudas.
- Evalúa tu situación actual
El primer paso es conocer exactamente cuánto debes y a quién. Toma papel y lápiz, Excel o las notas de tu teléfono y anota:
- El tipo de deuda (tarjeta, préstamo, crédito comercial, etc.).
- El monto pendiente.
- La tasa de interés.
- La cuota mensual y la fecha de finalización.
Con esta información, podrás identificar cuáles son tus deudas más costosas y cuáles estás cerca de terminar.
Prioriza siempre las que tienen tasas de interés más altas, ya que son las que más afectan tu bolsillo y usualmente tu historial crediticio, sobre todo si se trata de una tarjeta de crédito. Y si estás a punto de saldar una deuda pequeña, hazlo: liberar una cuota mensual te ayudará a ganar impulso.
Ejemplo: Si tienes una tarjeta de crédito con un 60% de interés anual y un préstamo personal al 18%, enfoca tus esfuerzos en la tarjeta. Aunque el monto sea menor, el interés te está costando más dinero cada mes.
- Crea un plan de reducción de deudas
Ya con tus deudas organizadas, diseña una estrategia para los próximos tres meses. Puedes elegir entre dos métodos populares:
- Método bola de nieve: paga primero la deuda más pequeña y, cuando la termines, destina ese dinero al siguiente préstamo. Este método te da motivación rápida.
- Método avalancha: paga primero la deuda con mayor tasa de interés. Aunque los resultados tardan un poco más, ahorrarás más dinero a largo plazo.
También puedes negociar con tus acreedores, muchas veces, si adelantas pagos o liquidas una deuda antes del plazo, te ofrecen descuentos en intereses o facilidades de refinanciamiento.
Consejo: Crea un calendario de pagos de octubre a diciembre, tener fechas claras te ayudará a mantenerte enfocado y medir tu progreso.
- Aprovecha tus ingresos extras
El último trimestre del año trae oportunidades adicionales: doble sueldo, bonificaciones o ingresos por trabajos extras, en lugar de gastarlo todo en las fiestas o regalos, destina una parte importante a tus deudas.
- Usa al menos el 50% de tu doble sueldo para saldar tus deudas más costosas o liquidar aquellas que estás por terminar.
- Si eliminas una deuda, redirige el pago mensual que hacías hacia otra.
- Si te queda un excedente, guárdalo como colchón financiero para emergencias o gastos del próximo año.
Ejemplo: Si recibes un doble sueldo de 40,000 pesos y te quedan 15,000 por pagar de un préstamo con 18% de interés, saldarlo de una vez te ahorra meses de pagos e intereses adicionales.
- Ajusta tus hábitos financieros
Salir de deudas es solo el comienzo, para no volver a caer, necesitas cambiar ciertos hábitos de inmediato:
- Crea un presupuesto mensual que incluya tus gastos fijos y tus pagos.
- Evita usar las tarjetas de crédito para cubrir gastos cotidianos.
- Automatiza tus pagos para evitar retrasos o cargos por mora.
- Ahorra antes de gastar, no después.
Tip: Cada vez que termines de pagar una deuda, sigue separando ese dinero, pero en lugar de gastarlo, úsalo para tus metas financieras, como invertir, viajar o crear tu fondo de emergencia.
- Construye hábitos sostenibles
Una vez que logres salir de deudas, no bajes la guardia, mantén tus finanzas bajo control con estos hábitos:
- Revisa tus finanzas al menos una vez al mes.
- Utiliza herramientas digitales o plantillas para dar seguimiento a tus pagos.
- Celebra tus logros, pero con moderación.
La meta al final siempre debe ser cerrar el año con menos deudas, más organización y un plan claro para iniciar el próximo año con finanzas saludables y enfocadas en el crecimiento.
Salir de deudas antes de fin de año es posible si combinas tres cosas: claridad sobre lo que debes, estrategia en tus pagos y disciplina con tus ingresos. Aprovecha el doble sueldo, organiza tus cuentas y recuerda que la libertad financiera comienza cuando tomas el control de tus decisiones.
